En esta primera
semana de Marzo, se celebra en Nueva York reuniones preparatorias y plenarias
sobre el tema de la Mujer, ya que se acerca el 8 de Marzo: Día Internacional de
la Mujer. En esta ocasión el tema de las reuniones ha girado alrededor de la
violencia contra la mujer o violencia de género. Siendo tan amplio este tema,
debería suponerse que englobaría todos los tipos de violencia que aquejan a las
mujeres del mundo, pero no es así.
Al reunirse tantos
representantes de tan diferentes países alrededor del mundo, y escuchando
algunos exponentes en estos foros, se nota la terrible realidad de que en
algunas partes del mundo se ejerce tipos de violencia que uno supone superados
e imposibles de concebir: trata, mutilación, esclavitud entre otras. Sorprendentemente
la mayoría de los temas de violencia que se tratan son los que imperan en
países pobres y poco desarrollados, donde es urgente la erradicación de estos
tipos de violencia inhumana.
Pero en el
desarrollo de las agendas no se tocan los TIPOS DE VIOLENCIA DE GENERO MODERNOS.
Esos que se dan mas en comunidades del primer mundo, donde la violencia de género
se presupone superada, y que transpiran al tercer mundo, donde se sufren ambas.
Se trata de
violencia ejercida por medio de la tecnología, medicina, medios de comunicación
o grandes conglomerados, como gobierno, organismos internacionales, grupos
comerciales o farmacéuticos.
Estos MODERNOS
tipos de violencia se ejercen de manera más sutil, menos evidente, pero
por eso, mas perniciosa que las mencionadas al principio. En estos, se lleva a
la mujer a ver como normal, o incluso como elemento liberador o de ayuda, dinámicas
violentas que logran alcanzar los objetivos de los grupos que las promueven.
Tal es el caso
del cyberviolencia, que se da en las redes sociales y medios de comunicación,
donde el anonimato y la liberalidad de los medios, atrapan a muchas mujeres en
ciclos de violencia, abuso y esclavitud, que se disfrazan de “libertad sin tabúes
“
O la de
políticas extranjerizantes, propuestas con intención de “ayudar”, que aplican
los organismos internacionales a mujeres de diferentes culturas, credos, y
países, sin mayor consideración por ellas o sus circunstancias. Es una
imposición violenta de soluciones “unitalla”, que además de no ayudarlas a
resolver sus problemas, les crean nuevos y, a veces, hasta les arrebatan su
idiosincrasia, suplantándola con la de otra cultura, que las objetiviza y las
aísla, en aras de una”independencia personal” que en su propia tierra no
funciona.
Además de la
violencia, que han introducido la apertura de los mercados de los diferentes
países, dando entrada a conglomerados comerciales y farmacéuticos que importan
estándares de éxito y belleza de otras culturas y que violentan a las mujeres
en su autoimagen, y afectan hasta su salud.
Es tiempo de hablar de este NUEVO TIPO DE VIOLENCIA MODERNA, que
estandariza, comprime y expone a la mujer a muchos abusos y esclavitudes.
Prueba del efecto devastador que tienen, estas han llevado a muchas a la
desesperación, e inclusive al suicidio.